Frases Anónimas

En Este Mundo No Existe Ninguna Verdad Absoluta, Sin Embargo , Esto Es Algo Absolutamente Verdadero.

Que díficil es amar cuando tanto amamos y en la persona que pensamos ni en su pensamiento estamos.

Lo malo de la ignorancia es que va adquiriendo confianza a medida que se prolonga.

No és fuerte áquel quién nunca cae, sino aquel quien al caer tiene la suficiente fuerza cómo para volver a levantarse.

Siempre hay quién anda en busca de un buen amigo, pero són pocos los que procuran serlo.

Enuncia tu verdad de manera clara y serena y escucha a los demás, incluso al que crees torpe e ignorante ya que también ellos tienen su historia.

Lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia.

Un amigo es alguien que lo conoce todo de ti, y sin embargo... te aprecia.

No se trata de añadir años a la vida, sino de dar vida a los años.

Lo malo de ser puntual es que llega uno a un lugar y no hay nadie allí para apreciarlo.

Ama la verdad, pero perdona el error.


domingo, 28 de septiembre de 2008

Posdata: Te quiero





Sinopsis

Holly y Gerry Kennedy forman un matrimonio perfecto. Para ella, su divertido e impetuoso marido irlandés es el amor de su vida. Por eso, cuando muere tras una enfermedad, Holly queda destrozada. Gerry, a sabiendas de cómo reaccionaría su mujer, ideó un plan: antes de morir, le escribió una serie de cartas que iría recibiendo durante semanas para animarla y guiarla en un viaje de redescubrimiento de sí misma. Todas las misivas terminan con un "Posdata: Te quiero" que la empujan a un nuevo futuro.
La película está basada en el bestseller internacional homónimo de la autora irlandesa Cecelia Ahern, quien sólo tenía 21 años cuando lo escribió. El mensaje de esperanza y la historia de un amor tan profundo, que mezclaba situaciones de humor y drama a la vez, cautivo al gran público y al director Richard LaGravenese. Guionista de películas como "Los puentes de Madison" o "La princesita", LaGravenese se colocó detrás de la cámara con "De ahora en adelante" y recientemente ha dirigido una de las historias de "Paris, je t'aime". En su anterior película, "Diarios de la calle", contó con Hilary Swank como protagonista, con la que ahora repite.
La pareja protagonista es una de las más guapas del momento. Por un lado está la ganadora de dos Oscar Hilary Swank (Million Dollar Baby) y por el otro, el atractivo escocés Gerard Butler, muy de moda gracias a su Leónidas de "300". Junto a ellos, un lujo de actores secundarios: Kathy Bates (Misery), Lisa Kudrow (de la serie "Friends"), Harry Connick Jr. (de "Will y Grace"), Gina Gerswhon (de la versión norteamericana de "Betty la fea") y Jeffrey Dean Morgan (de la serie "Sobrenatural").

Crítica

El cine romántico norteamericano parece haber encontrado un filón exótico en el paraíso celta de las islas británicas. Después de que Patrick Dempsey y Michelle Monaghan se enamorasen hace apenas un mes en la verde Escocia, Hilary Swank y Gerard Butler hacen lo propio en la no menos verde Irlanda. En ambos casos se trata de inyectar cuarto y mitad de bucolismo y buscar de paso un pretexto para colar gaitas y romanticismo céltico en la acaramelada banda sonora. Todo precioso entre postalitas apabullantes, ideales casitas de campo y lugareños bohemios, automáticos y de una sola pieza. De hecho lo mejor de "Posdata: Te quiero" es su buen gusto por la flora irlandesa y el paisaje diez. Lo demás, lo otro, es un espectacular bombardeo de estereotipos del drama trágico-romántico con pespuntes de comedia apuntalada por personajes complemento como el de Phoebe-Lisa Kudrow, que es, faltaría más, pariente cercana de la entrañable idiota de "Friends".
Así, entre soluciones de molde enuncia Richard LaGravenese la fórmula romántica de perogrullo, dibujando el espacio de un amor ejemplarque sortea la incómoda imposición del espacio-tiempo planteando una correspondencia entre el novio muerto y la novia viuda destinada a devolver a ésta última a la vida. Para ello el guión se inventa un diabólico montaje de cartas encadenadas organizado por el malogrado novio antes de irse al otro barrio que se mueve entre la improbabilidad y el delirio con poco ánimo de amoldarse a la lógica. Disculpados los artificios del reencuentro postal entre los dos cónyuges más allá de la muerte, "Posdata: Te quiero" deshoja con poco estilo todas las convenciones matriz de la epopeya romántica con redención al fondo, enfilando un sendero parco en sorpresas y previsible del primer al último quiebro, entre excesos de azúcar y personajes-tipo sin profundidad ni media ni larga.
LaGravenese busca siempre la lágrima rápida y fácil y ocasionalmente la encuentra. Pero a lo bruto, con estrategias innobles de manipulación sentimental o, en el mejor de los casos, gracias al compromiso y oficio de sus dos actrices principales: Hilary Swank y, sobre todo, una Kathy Bates inmensa que recupera felizmente la mejor versión de sí misma. Lo demás es guarnición para consumidores compulsivos de emociones en lata, una película de esas extremadamente disfrutables en una sobremesa televisiva de tedioso festivo.

No hay comentarios: