Frases Anónimas
Que díficil es amar cuando tanto amamos y en la persona que pensamos ni en su pensamiento estamos.
Lo malo de la ignorancia es que va adquiriendo confianza a medida que se prolonga.
No és fuerte áquel quién nunca cae, sino aquel quien al caer tiene la suficiente fuerza cómo para volver a levantarse.
Siempre hay quién anda en busca de un buen amigo, pero són pocos los que procuran serlo.
Enuncia tu verdad de manera clara y serena y escucha a los demás, incluso al que crees torpe e ignorante ya que también ellos tienen su historia.
Lo contrario del amor no es el odio, sino la indiferencia.
Un amigo es alguien que lo conoce todo de ti, y sin embargo... te aprecia.
No se trata de añadir años a la vida, sino de dar vida a los años.
Lo malo de ser puntual es que llega uno a un lugar y no hay nadie allí para apreciarlo.
Ama la verdad, pero perdona el error.martes, 11 de noviembre de 2008
Vidas Cruzadas
lunes, 10 de noviembre de 2008
Para esas personas...

Hay personas en la vida de uno que llegan un día y pueden tocarte el corazón. Son personas que llegan así por casualidad, sin querer, dejando una gran huella. Muchas de estas personas las conoces en las colas del supermercado, en el ascensor o en un avión. Son situaciones de lo más proclives para conocerlas. Muchas de ellas no las volverás a ver mas nunca y puedes contarle tus penas más profundas.
Pero también hay otras que quieres que se queden a tu lado por siempre y para siempre, porque te hacen reír, porque llenan ese espacio de corazón, porque te hacen que todos los días sean diferentes, que no haya ninguno igual e irrepetible.
PD: Si hay algo que tenga que decirte te lo diré al oído
La cara oculta de la luna
Todas las personas tenemos dos caras, la que deseamos y ansiamos ser y proyectamos a los demás y la que nos frustra y nos avergüenza y ocultamos. Esto es más conocido como "La cara oculta de la Luna"
La cara oculta de la luna nos expresa con sutilidad que hay cosas que no podemos ver con los ojos, pero que no por ello dejan de estar. Mientras la parte visible es lo racional y objetivo, lo oculto es lo irracional y subjetivo.
Se me ocurre añadir un detalle más profundo o filosófico. La luna carece de luz propia; ella refleja la luz del sol. Entonces, y por extensión… ¿qué es lo que vemos cuando miramos algo? ¿Lo que es, o una proyección de otro algo?
Alguien dijo que vemos a través de nuestros ojos, y sólo a través de estos. Desde luego, la luna invita a entrar en el mundo de imaginación y fantasía. A soñar con la luna…

Ilusiones

Puedes estar toda una vida respirando y no darte cuenta de lo realmente importante.
Puedes estar toda la vida pensando que eres libre, que vuelas por el azul del cielo cuando no mas te atan cadenas que no dejan levantar el vuelo del ras del suelo.
Puedes estar toda una vida amando sin ser amado y creer sin querer que esos minutos que te dedica son como agua en el desierto.
Los pequeños detalles, un te quiero, una sonrisa o una simple caricia.
jueves, 6 de noviembre de 2008
La esperanza tiene un lugar en el corazón del amante.
Este es un deseo de que el amor sea amable, y si no lo es, que ese sentimiento precioso cautivo en la caja de Pandora, pueda encontrar un lugar en el corazón de quien ama.
domingo, 2 de noviembre de 2008
ENAMORARSE NO ES TAN FÁCIL
Lo malo no es que el cine, en general, no sepa hacerlo. Lo malo es que, por la poderosa influencia del cine, tanto en la pantalla grande como en la chica, hay muchos que han llegado a la conclusión de que esa expresión cinematográfica, tan parcial y pobre, es el producto verdadero. Como decía el otro día un presentador en un programa de radio: «¿Qué otra cosa es el amor, sino hacer el amor, qué más se puede añadir?». Cuando una oyente le llamó, para decirle que el amor es también fidelidad, perdón, tener proyectos comunes, el locutor respondió: «Te oigo, pero te entiendo menos que si me hablaras en chino».
Dice Erich Fromm que no hay amor donde no se cuida al otro, donde no hay interés por conocerlo de verdad, donde no se le respeta, donde no hay responsabilidad mutua. Son los cuatro grandes factores del amor, a los cuales se añade, en el caso de amor de pareja, la atracción sexual, ese factor que algunos creen que es el único. Cuando se quiere a alguien de verdad, se le cuida como una madre cuida a su hijo, se le conoce como uno se conoce a sí mismo, se le respeta como a la persona más importante que se haya conocido en la vida y se siente uno responsable de él o de ella, para hacerlo mejor cada día. Esta responsabilidad la expresó Salinas cuando dijo a su mujer amada: «Quiero sacar de ti lo mejor de ti misma»; y más poéticamente todavía lo dijo Neruda: «Yo quiero hacer contigo lo que la primavera hace con los cerezos».
Enamorarse no es sólo un sentimiento, sino una tarea. Los bioquímicos hablan de una especie de anfetamina, la FEA (fenil etil amida), que se segrega en los primeros tiempos, en los dos primeros años de enamoramiento. Luego desaparece y algunos se sienten defraudados y buscan enamorarse de otra persona. Pero la FEA no desaparece sin más, sino que deja paso a la producción de endorfinas, muy gratificantes, tranquilizadoras, que aumentan la sensación de paz, por estar junto a esa persona única. Remite el entusiasmo y el deslumbramiento, pero aumenta la seguridad de paz, el amor hondo.
Enamorarse no es hacer el amor. Es hacerse persona y hacer persona al otro. Es una tarea hermosa, que dura toda la vida. San Pablo dice que los que forman un matrimonio cristiano deben amarse como Cristo ama a su Iglesia. Es decir, dando la vida, poco a poco, por el otro, queriendo lo mejor para la otra persona, no ayudándole a ser mediocre, sino a ser lo mejor que puede llegar a ser. Como la primavera hace con los cerezos.
MANUEL SEGURA, S.J. (ARTÍCULO PUBLICADO EN EL PERÍODICO EL DÍA. 27-01-2001)
Casualidades...

Que casualidades tiene la vida…
No te conocía hasta hace un par de días, ni siquiera sabia de tu existencia y ahora es como si te conociera de siempre…
Podríamos habernos visto antes, podríamos habernos cruzado miles de veces, por la calle, por los bares…y ninguno de los dos reparó en el otro…
Podrían separarnos un par de metros y ni siquiera vernos…
Es como si estuviéramos ciegos y el destino esperara para sacarnos la venda de los ojos para ver las cosas que nos habíamos perdido durante tanto tiempo.
Que casualidades tiene la vida…